Durmiendo en tu ombligo... Vanesa Martin y el Arrebato

Friday, August 21, 2009

Perdon....


Un dia encontre nuevamente al amor en mi camino, me miro, me sonrio y lo segui, volvi a creer en el amor...

Hoy me doy cuenta que no sirvo para amar, que suelo echar a perder lo mejor que tengo en mi vida y lo destruyo...

Hoy nuevamente me encuentro aqui llorando, recriminandome mis errores cometidos, recriminandome por lastimar a la persona que amo...

hoy nuevamente me doy cuenta que el amor y yo llevamos rumbos diferentes...

Perdón Lili...

5 comments:

Celeste said...

Sabes? Aunque también tuve un tiempo lejos de mi espacio, no estuve lejos de todas las historias que me acompañan allí y de regreso, corroboro que es así. Fíjate que yo también logré levantarme y logré recuperar aquello por lo que tanto lloré al perder. Lo recuperé para volver a decir a adiós y para volver a empezar con todo lo que cuesta.

Hoy, consciente de mis errores y de que he estado equivocada al pensar que nunca llegaría, me siento mejor. Y me siento mejor sabes por qué? Porque no es que no esté hecha yo para el amor, ni él para mí, es sólo que tenía expectativas equivocadas al respecto y gracias a ella me llevaba por el medio al mundo.

Gabrielle, una persona con la sensibilidad que tú demuestras al ecribir lo que sientes no puede estar hecha sino para amar y para ser amada. Sólo deja que pase, como venga, como sea, que igual nunca será como imaginamos. Simplemente, será.

Beso celeste...

manu said...

bueno por lo menos en la tragedia de la frustación del perpetuo amor...no me siento tan solo o inepto. será cuestión de tomarlo con naturalidad..no queda otra.

un saludo!
atte. manu

AZUL said...

Nadie sabe amar y el juego del amor asi es, esporadico, pasajero solo debemos aprender a vivir y gozar sus momentos cumbres para los tiempos de veda.

marcowater said...
This comment has been removed by the author.
marcowater said...

Tal vez John Lennon lo explique mejor que yo:
...
Nos hicieron creer que cada uno de nosotros
es la mitad de una naranja, y que la vida sólo tiene sentido
cuando encontramos la otra mitad.
No nos contaron que ya nacemos enteros,
que nadie en nuestra vida merece
cargar en las espaldas
la responsabilidad de completar lo que nos falta.
...
date un respiro y sonrie